Viborianus
Victoriano Robles Cruz.
Recientemente, en estos primeros días de diciembre (la segunda semana), el ingeniero Mario Villanueva Madrid, tuvo que trasladarse a la ciudad de Playa del Carmen para atender sus problemas de salud.
En el mensaje, con el cual informa a los ciudadanos exhibe -discretamente- las carencias de la Capital de Quintana Roo, la de sus hospitales oficiales y del sector salud en general.
Redireccionamos el mensaje con la dirección electrónica para que puedan leerlo completico. “Amigas y amigos, les informo que por cuestiones médicas he tenido que trasladarme a Playa del Carmen (https://n9.cl/okic2) para atender mis problemas de salud, entre ellos corazón, pulmones y tiroides”.
Y continua en su mensaje el ingeniero Mario Villanueva: “esta situación pone en evidencia las limitaciones que enfrentamos y que afectan a muchas personas que, como yo, deben buscar atención en otras ciudades”.
Gobiernos van y gobiernos vienen y el sector salud sigue muy paupérrimo. Cada sexenio o quinquenio los aspirantes seducen a los votantes con promesas de mejorar los hospitales, en sí, toda la infraestructura. Ese mundo de la salud ya ha sido señalado como un mundo infernal en Quintana Roo.
Sin embargo, esas promesas siempre han quedado en la piedra de los decálogos (las famosas Tablas de Moisés), en la cual expresan sus Leyes Divinas con un listado de buenas intenciones. Pero los resultados siguen siendo las eternas deudas con los quintanarroenses, contimás con los Chetumaleños.
Desigualdad e inequidad prevalecen en la brecha para poder ofrecer un sistema de salud para todos los quintanarroenses. Aquí, juega un papel importante el protagonismo, con el cual se intenta suplir y ocultar las reales carencias en infraestructura hospitalaria y las limitaciones de quienes gobiernan. ¡Pan y circo!
Ya en otras colaboraciones hemos señalado que quien coordina los esfuerzos del sector desde la Secretaría de Salud no es ni médico, en un administrador de empresas. Un tal Flavio Carlos Rosado. Pareciera que se requiere a alguien que administre los recursos, los teledirija a otros menesteres, a que haya algún interés por la salud de los ciudadanos de Quintana Roo. ¡El Mundo infernal…Incomprensible!
Los paseos turísticos en La Ciudad de México, en diversas dependencias federales, sólo son otro espectáculo empaquetado para la manipulación de los quintanarroenses; puesto que, nunca se ven los resultados. Los mismos ciudadanos nos confiesan que: “solamente se ve la obra del gobierno federal”.
En los mensajes del twittero Flavio Rosado (https://x.com/flaviorosado), solamente existe la palabra fortalecer, en sus diferentes conjugaciones. Dele una ojeadita para que observe los mensajes, sin algún resultado y, no encontramos algo de trascendencia que proporcione mejoramiento de la salud de quintanarroenses.
No solamente su desempeño es limitado y mediocre, sino que también su vocabulario. No encontramos el anuncio de alguna obra real, seria, existente, que nos tape la boca con los resultados de su desempeño. Sí encontramos muchas buenas intenciones del legado del decálogo de las tablas con sus divinidades.
¿En cuántos indicadores de la salud de los quintanarroenses nuestra entidad preside los primeros lugares por sus irrealidades y disfuncionalidades? No las mencionaremos porque el listado no cabría en el espacio de la columnilla.
Ojalá y el Ingeniero Mario Villanueva no sea nuevamente reprimido por atreverse tan valientemente a mencionar las debilidades y carencias de las instituciones de salud en Quintana Ro, pero sobre todo de la Capital Chetumal. No ha mencionado alguna mentira. El aparato represor puede actuar para mostrar sus poderes, no sus capacidades para mejorar la salud del ese Mundo Infernal.
PD.- “La familia política (Verde), debido a su disfuncionalidad, es inconsciente de su acciones*. De Jarrón de los olivos…
PD.- “En Viborianus… Nuestra idea de la Navidad perfecta es muy simple: amar a todos los demás”.
www.facebook.com/viborianuscolumna