Viborianus
Victoriano Robles Cruz.
Sin realidades, ahistóricos.
Vamos a intentar describir algunos detalles de los anfitriones con motivo de la llegada de la presidenta Claudia Sheinbaum a Quintana Roo, y en particular a la ciudad de Chetumal, su capital, aunque a muchos verdes les duela. Quieren llevársela a Cancún… ¡en serio!
Al menos lo que pudimos observar y averiguar de fuentes de alto predominio en credibilidad, y otros, presentes en los eventos. Comenzamos la observación en vivo, de la conferencia mañanera, muy formal, pero les podemos jurar que no aguantamos, como sucedió con muchos otros.
En mensaje del titular del ejecutivo local, muy rancio, de la más triste época priista, cuando se sentían los dueños del universo. Lleno de autoelogios, del alarde, de la jactancia. Así fue, en aquella etapa priista.
Ni que decir del tonito en la lectura, muy similar, si dejabas de ver y solamente te prestas a la escucha, te hacía recordar el sonido, el cantar, de los mensajes de los períodos de Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Enrique Peña, (QEPD).
Y la pregunta, pues es obvia: ¿por qué aprender los sucesos malos? Terminan siendo “sujetos” ahistóricos, totalmente ajenos a la historia, al devenir de los tiempos reales. Para qué trasladarse tan lejos, para qué disimular, si bien pueden bañarse de la realidad quintanarroense. ¿A quién tratan de impresionar?
¿Por qué la insistencia en pretender engañar a los presentes y escuchas? Pensamos que los morenistas tienen muchas cualidades, y en muchas coincidimos, con ese misticismo Moreno, pero, que se pierden con estos mensajes llenos de ínfulas. Muy vacíos de las realidades.
Las irrealidades fueron las que destruyeron a los grandes partidos y a los grandes imperios.
Y si el mensaje sonaba irascible e innecesario, la respuesta que evocaron por un cuestionamiento del colega Reynoso, sobre la cuestión del turismo fue el acabose, la ruina. Una defensa a ultranza de cosas innegables.
Desde la petición a la presidenta de permitir esa defensa hasta su incomprensible relato. Pues a pesar de querer componer, la realidad sustituye toda defensa. ¡Querer arrebatarle el protagonismo a la Presidenta! Descuido de las formas.
Debemos reconocer que existen realidades o verdades tan evidentes que no requieren de un lapso temporal para ser reconocidas como tales. ¡Solitas brotan!
Un ejemplo, el escándalo por el ocultamiento de más de una docena de ambulancias, allí en el monte detrás de los patios del C5. Ya las movieron, y lo hicieron por la noche, como viles bandidos, para no ser vistas por los ciudadanos. ¡Vaya hipocresía!
Hasta los mismos colegas abonados, perdón franquiciados, nos confiesan que resulta muy difícil contribuir con un gobierno que comete muchos dislates e imprudencias. Sobre todo, las encuestas pagadas. Hay veces que los absurdos y desaciertos se reservan para otras ocasiones. La novatez la están pagando muy caro políticamente, pero ese daño, sólo lo reciben los Morenos. ¡Nadie es perfecto!
Curioso, también resulta atractivo la ausencia de la titular del ayuntamiento de Othón P. Blanco, este personaje sí ha sido y seguirá siendo de extracción morenista. ¿Será por eso que no la vimos en los eventos?
En fin, como quisieron que la principal morenista de la nación no se viera a plenitud en su evento por el sur de Quintana Roo.
Viene a nuestro recuerdo un dicho popular que reza “mejor no me ayudes, compadre” (y puede ser comadre), que en otras palabras significa cuando una persona u organización pretende auxiliar a alguien, pero resulta que este favor más bien le hará más daño o provocará un trastorno total, contrario a lo que se pretendía.
Seguiremos recogiendo más detallitos de la visita de la presidenta Claudia Sheinbaum. ¡Grata visita! ¡Ojalá venga más seguido!
PD.- “Con amigos así, ¿quién quiere enemigos?” dicho popular.
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